DESCUBRIENDO RINCONES INCREÍBLES
Knysna forma parte de la llamada Ruta Jardín. Es de hecho su ciudad capital y a lo largo de su
recorrido podrán disfrutarse de algunas de las estampas más hermosas del sur de África. Entre
el patrimonio d Knysa se encuentran sus acantilados y, sobre todo, el parque de elefantes de
Knysna. En él es posible disfrutar de este precioso animal en gran número y contemplarlos de
cerca. Entre su oferta natural se encuentra también el Jardín del Edén, donde se pueden
disfrutar un gran número de aves y especies autóctonas. Las playas de Buffalo Bay son también
un buen lugar para descansar y disfrutar del relax de un entorno de gran belleza y preparado
para acoger con toda hospitalidad a sus visitantes.
Durban es una ciudad ubicada en Sudáfrica y una de las más interesantes por su historia y la
mezcla de culturas que puede ofrecer al visitante. Es una ciudad que tiene una antigüedad de
150 años que, aunque fue fundada por los ingleses, cogió forma gracias a la población india. Su
historia es de lo más curiosa: en un principio los ingleses desecharon esta zona por salvaje e
inhóspita; sin embargo, con el tiempo vieron su potencial para plantar caña de azúcar.
Ofrecieron este trabajo a las tribus cercanas de zulúes que lo rechazaron. Fue entonces cuando
importaron trabajadores indios que, con el tiempo, fueron llegando en goteo.
Situada en la costa sureste del país, en la bahía de Algoa, esta ciudad es famosa por su buen clima y playas limpias de arena fina.
Oudtshoorn es considerada como la capital mundial del avestruz. La razón es que el ave más
grande del mundo puede encontrarse en esta región en un gran número y con gran facilidad.
Oudtshoorn se trata de un enorme área de enorme belleza en la que este animal campa a sus
anchas. Se encuentra en Sudáfrica, y concretamente dentro de la famosa Ruta Jardín del Cabo,
que incluye varias localidades rodeadas de montañas. En el caso de Oudtshoorn ofrece un
entorno de rocas rojas y vegetación baja. El avestruz ha sido tradicionalmente considero como
un ave noble y reverenciada por la realeza. Por ello, en el pasado los grandes dignatarios
buscaban sus plumas para adornar sus ropas.