DESCUBRIENDO RINCONES INCREÍBLES
Como en otras ciudades del país, los carriles bici están por todas partes, y puedes elegir entre este medio de transporte para conocerla o ir a pie mientras escuchas sus timbres para pasar. Entre los puntos de interés destacan el Castillo de Binnenhof, que se amplió con una plaza y el edificio Ridderzaal y que hoy es la sede del Parlamento holandés; la puerta Grenadierspoort, que se encuentra junto al Museo Pinacoteca Mauritshuis, y que es la que accede al Parlamento; el Lange Voorhout, que es bulevar más antiguo de la ciudad y donde están las casas más estrechas de ella, y conocido en verano por el Campeonato de esculturas de arena; el Palacio Real, en pleno centro y rodeado por tiendas exclusivas en la calle Noordeinde, la calle Gravenstraat, con un edificio de decoración art nouveau, o The Passage, una galería inspirada en las típicas italianas.