Perú Arqueológico

Salida en vuelo con destino a Lima. Llegada y alojamiento.

Media pensión. Iniciamos el recorrido visitando Barranco, uno de los distritos más pequeños y, a la vez, la zona bohemia de Lima, la Plaza, el Puente de los Suspiros, el Monumento de Chabuca Granda, la Ermita y la Bajada de Baños. Seguiremos nuestro recorrido por Chorrillos o San Pedro de los Chorrillos, que debe su nombre al agua subterránea que emanaba de los acantilados hacia la playa de Agua Dulce, además de ser un pueblo de pescadores. El Santuario Arqueológico de Pachamamac fue el más importante por más de mil doscientos años durante el período prehispánico. Su prestigio se debe principalmente a su oráculo, consultado por curacas y señores principales de todo el antiguo Perú que peregrinaban formando parte de un gran ritual andino. El Dios Pachacamac era muy temido pues se le atribuía el poder de hacer temblar la tierra, así lo demuestran los templos levantados en su santuario. Almuerzo. Tarde libre.

Desayuno. Por la mañana, recorrido en la Huaca Pucllana, sitio arqueológico de la cultura de Lima. Traslado al centro histórico de la ciudad para conocer la Lima antigua reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Visita a la Iglesia y al Convento de San Francisco, la Plaza Mayor con el Palacio de Gobierno, el Palacio Municipal, la oficina de correos y la Catedral de Lima con la sacristía mayor y la tumba del conquistador y fundador de Lima, Francisco Pizarro. Tendremos una visión panorámica de los barrios modernos de San Isidro, Miraflores y magníficas vistas al océano Pacífico de regreso al hotel. Traslado al aeropuerto para tomar el vuelo con destino a Trujillo.

Desayuno. Encuentro con la ciudad prehispánica de la eterna primavera, Trujillo de Nueva Castilla, como fue llamada en su fundación en 1.535. Visita de las Huacas del Sol y La Luna, pirámides de la cultura Moche, parte del complejo arqueológico más importante construido por la cultura mochica, que se complementa con el centro político, ceremonial, administrativo, una urbanización y un cementerio de esta cultura ancestral. La Huaca de la Luna fue el tempo principal, con hermosos murales polícromos de adobe en una de sus paredes. Continuamos a Chan Chan, considerada la ciudadela de adobe más grande del mundo y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Terminaremos el día en Huanchaco, antiguo pueblo de pescadores que conserva el uso ancestral de los tup o “caballitos de totora”, embarcaciones de pesca utilizados por los Moche y los Chimú, manteniendo la tradición milenaria de la pesca artesanal; un balneario histórico a orillas del océano Pacífico.

Desayuno. Salida hacia Chiclayo. Nuestro camino atraviesa los valles formados por los ríos que bajan de los Andes y desembocan en el Océano Pacífico. Nos detendremos para visitar la huaca El Brujo, antiguo centro ceremonial con un legado de 5.000 años de ocupación por diferentes culturas, desde nómadas, moche, chimú, inca y los conquistadores; hasta nuestros días. Debe su nombre a los frisos polícromos de sus paredes. En este complejo arqueológico fue descubierta la tumba y el cuerpo momificado de una mujer joven de élite, posible gobernante de la cultura Moche, llamada la señora de Cao, con el ajuar propio de la aristocracia guerrera.

Desayuno. El Museo Tumbas Reales de Sipán es un museo arqueológico inspirado en las antiguas pirámides truncas de la cultura preinca mochica; simulando la tumba original hallada en el año 1987, que alberga más de dos mil piezas de oro, plata, piedras preciosas, cerámicas y ajuares del único gobernante del antiguo Perú hallado hasta la fecha: el Señor de Sipán. Visita al Museo Bruning, que guarda las colecciones de arte y joyas de la cultura Lambayeque; y demás culturas desarrolladas en la región. Traslado a la estación, para salida en autobús de línea regular nocturno a Cajamarca. Noche a bordo.

Llegada y traslado al hotel. Visita de esta hermosa ciudad colonial a través de la Plaza de Armas, lugar de encuentro entre Atahualpa y Francisco Pizarro; el cerro de Santa Apolonia, la Catedral, uno de los edificios religiosos barrocos más representativos del Perú colonial; la iglesia de San Francisco y el complejo monumental de Belén, que alberga el museo médico, el museo arqueológico y etnográfico.

Desayuno. Salida hacia Cumbemayo con sus montañas volcánicas erosionadas por el viento, que se confunden con un bosque de piedra. Visitaremos un canal prehispánico excavado en piedra que data de 1.500 a. C, con petroglifos grabados en los bordes del canal y en las cuevas vecinas. Continuación a las ventanillas de Otuzco, nichos excavados en la roca volcánica, que dan acceso a galerías que posteriormente fueron utilizados por los incas como graneros.

Desayuno. Salida en vuelo con destino a Cuzco, vía Lima. Esta ciudad no es sólo la capital del Imperio Inca, el Tahuantinsuyo, el ombligo del mundo; también es la capital arqueológica de América, en el corazón del Valle Sagrado de los Incas.

Desayuno. Salida hacia el Valle Sagrado de los Incas. Comenzaremos la visita en el mercado local y el sitio arqueológico de Pisac, uno de los más importantes y visitados del Valle Sagrado; con su forma de perdiz de puna. Se encuentra divido en dos zonas, la antigua, ubicada en la parte alta, un sitio arqueológico incaico; y la actual, en el valle, que data de la época colonial. Por la tarde visitaremos la fortaleza de Ollantaytambo, que se levanta sobre verdaderos cimientos incas; la distribución de las casas y sus canales que proveen al pueblo de agua de los glaciares, se mantienen intacta a pesar de la presencia de los conquistadores en la zona.

Desayuno. Traslado a la estación de trenes de Ollantaytambo. Escénico viaje en tren, a través del Valle de Urubamba hasta Machu Picchu Pueblo. Desde allí, ascenderemos hasta llegar a Machu Picchu, la impresionante ciudad perdida de los Incas, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural de Humanidad; con su conjunto monumental único, centro productivo, administrativo, religioso y militar; la expresión más completa de la perfección de la arquitectura Inca. Regreso al Valle Sagrado.

Desayuno. Mañana libre. Opción de realizar una excursión al Centro Arqueológico Ñaupa Huaca, el portal cósmico andino; lugar de importancia religiosa para los incas. Sus edificaciones están hechas en un acantilado bajo la montaña Pinkuylluna, considerada sagrada. El tallado más llamativo en el sitio es una especie de puerta trapezoidal o altar en forma de chacana, cruz andina. Su arquitectura está alineada con la constelación de la Cruz del Sur. En su parte trasera se encuentra una puerta conocida popularmente como la entrada tridimensional hacia otros sitios arqueológicos incas de importancia. A la hora indicada, traslado a Cuzco.

Desayuno. Visita del Museo Histórico Regional con sede en la que fuera la casona colonial del escritor y cronista cuzqueño Garcilaso de la Vega; que atesora una colección de objetos arqueológicos de las culturas pre-inca e inca, así como objetos arqueológicos prehispánicos, que evidencian el desarrollo cultural andino. Continuación al Museo de Arte Contemporáneo con una colección de 280 obras entre las que destacan las de famosos artesanos como Mérida, Olave y Mendívil. Por la tarde desde la Plaza de Armas visitaremos la Catedral, el Templo del Sol o Koricancha, templo Dorado en lengua quechua, que nos recibe con toda su fastuosidad; Sacsayhuaman, fortaleza ceremonial rodeada de hermosos paisajes. Tendremos una vista panorámica del adoratorio incaico de Qenqo, laberinto o zigzag en la lengua quechua, que se piensa fue un lugar de adoración a la madre tierra, la Pachamama; Puca Pucara, torreón rojo en lengua quechua; centro administrativo y militar que sirviera como puesto de control del Camino Inca, situado en un lugar estratégico del camino hacia el Antisuyo, provincia amazónica Inka y Tambomachay conocido como los Baños del Inca y considerado como un lugar de culto al agua, donde se expresa nuevamente el alto grado de maestría en ingeniería hidráulica de los Incas, considerado uno de los pilares de la cosmovisión andina

Desayuno. Salida en vuelo a Lima y conexión con el vuelo de regreso a España. Noche a bordo.

Llegada.